domingo, 26 de febrero de 2012

Ya no me das pena


Esa arrogancia demuestra tu necesidad de afecto, que inevitablemente no conseguiste de mi. Esa Valentía de no querer saber de mi, me alegra. Insistirte convertiría esta alegría en un chiste.
Y la realidad es que ya perdí las ganas de reírme.

No te alejes tanto .....


El Amor es para los inocentes,
no me extraña,
siempre he sabido que soy culpable.

Iré dejando obras incompletas,
malos recuerdos,
viejas amistades,
me quedare solo,
con la gracia de saber que soy odiado
y también querido.

Ego, te absuelvo.