
Sus pelos rubios te hacen sentir que ya conoces todo el mundo, su hablar extraño te transporta a distintos lugares a los que nunca has ido. De un momento a otro ya has dado la vuelta al mundo con un beso.
Sus ojos oxigenados simulan calmados mares, sus delgados y alargados dedos hacen que sientas al tocarlos todo lo que ellos han sentido. Se resecan y se ensucian tus palmas, las paredes de Francia se plasman en tus gorditos dedos.
Seras Brigitte Bardot ahora pero terminaras siendo Cabiria de Fellini. Alguien tratara de ahogarte en el mar y se llevara tu bolso.
Y al final, tu sonrisa no esconderá tu tristeza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario